En el segundo numero de la revista educ@.upn.mx se publico un texto referente a una leyenda mitológica intitulada “La manzana dorada”(para saber mas al respecto recomiendo leer dicho artículo*) , de lo cual puedo rescatar lo siguiente:

El ámbito educativo, -por citar el área de mi interés personal-, se encuentra inmerso dentro de grandes paradigmas en donde la decisión de un solo individuo puede trasformar para bien o para mal todo lo que conocemos. Recordando lo que es un paradigma por parte de Tomas Kuhn*,su concepción más acorde a este pensamiento sería: “ Conjunto de acuerdos sobre cómo considerar e investigar la realidad”, lo anterior nos establece que para logarlo hay que seguir un patrón aceptado que nace del consenso del grupo social establecido.

Con la idea de paradigma existe una yuxtaposición con el concepto de utopía, ya que cada paradigma en su consumación conduce a imaginar diferentes utopías, el ser humano en su naturaleza más pura supone una aventura, sino tiene visiones utopías pierde su naturaleza humana, por lo cual podemos asegurar que “el espíritu humano puede tener conocimiento de sí mismo y pude crear formas mejores de naturaleza humana” para ese conocimiento propio se necesita adentrarse en lo más profundo del ser y en su esencia de cómo concibe el mundo. Cada ser humano es irrepetible y posee en sí la capacidad trasformadora de lo que conoce por y para la libertad del alma es lo que lo mueve y suscita a actuar.

Recordemos que vivimos en sociedad, y que cada grupo o individuo posee una visión propia de su realidad y es por ello que se enfrenta ante el grave problema de convertirse en él animal político que todos llevamos dentro, cada sujeto intentara hacer valido su propio paradigma ante los demás y se convertirá en una lucha por el poder sobre el poder, la razón deberá conducirnos a la elaboración de utopías y aceptación de paradigmas que velen por un bien común.

Cada paradigma debe ser sustentado en una teoría, me interesa pues la teoría pedagógica para la formación del hombre. Pedagogía significa enseñar, instruir, “las personas se educan para ganarse una forma a través de la cual valga la pena vivir”, Platón en su obra “La República” se plantea una pregunta crucial : -¿Cómo educar a los hombres para crear una sociedad de hombres justos?- la respuesta que dio Platón, fue, que por medio de la exploración de uno mismo se logaría tal paradigma, pues bien por medio de la instrucción del hombre sustentada en un paradigma pedagógico trasformador se debe coadyuvar a la mejora de una sociedad justa valiéndose de la especulación de la mente.

“La teoría pedagógica sería un saber que contempla cómo es que el ser humano forma y trasforma su naturaleza que ya no es sólo naturaleza, sino destino, ethos, su carácter, su modo de ser y de comportarse, su actividad intelectual capaz de afectar a miles de espectadores a un tiempo y de estimular emociones.

Porque sólo el ser humano es el único, entre todos los demás seres, que disfruta de su conducta y es el único de modificar su comportamiento, el único que puede cambiarlo y transformarlo, porque sólo él tiene s ser incompleto.”


¿Y tú que paradigma quieres tomar para navegar por este espacio sin fin?, ¿Seguirás con los paradigmas establecido o los romperás y crearas uno más revolucionario?

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*Véase “La manzana dorada” en el segundo numero de la Revista educ@.upn.mx en su sitio oficial o accediendo desde aquí
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